“Ruaj HaKodesh y fuego: Aviva el don que está en ti”
- Elizabeth Jaar
- 3 nov
- 3 Min. de lectura
Hoy venimos a encender lo que YHWH [El Eterno] depositó en tu interior. Tal vez te has sentido apagada, distraído, con el corazón pesado… pero el Ruaj HaKodesh [Espíritu Santo] no ha dejado de soplar sobre ti. El fuego de Elohim [Dios] no se apaga: se alimenta. Yeshúa HaMashíaj [Jesús el Mesías] quiere avivar el don que está en ti, reactivar tu sensibilidad espiritual y alinearte con tu propósito. Esta palabra no es teoría: es una activación. Prepárate para recibir, creer y accionar.
Verso bíblico central
📖 2 Timotiyos/Timoteo 1:6 — “Te recuerdo que avives el don de Elohim que está en ti…”
2Ti 1:6 Por esta razón, te vuelvo a recordar que avives el don de Elohim que hay en ti por la imposición de mis manos. 2Ti 1:7 Porque no nos ha dado Elohim un espíritu de cobardía, sino de poder, de amor y de dominio propio.
No es un don prestado; es un depósito (Gen 2:7) de Elohim que debe avivarse —no una sola vez— sino continuamente.
Reflexión profética poderosa
El fuego del Ruaj HaKodesh no es un adorno espiritual; es la llama que purifica, ilumina y empuja tu vida al diseño de YHWH. Muchos pierden calor por tres fugas:
Desenfoque: cuando te distraes, el carbón se separa de la brasa.
Desánimo: cuando crees mentiras de derrota, el viento del Espíritu encuentra resistencia.
Descuido: cuando dejas de alimentar la llama con Palabra, oración y obediencia.
Hoy el Padre te recuerda: el don no murió; se durmió. Y cuando el Espíritu sopla, lo que parecía ceniza vuelve a rojo vivo. Avivar es tu parte (creer, declarar, obedecer); encender es la parte del Ruaj HaKodesh. Tú acercas la mecha; Él derrama el aceite.
Declaración de activación
Declara en voz alta, con fe:
En el Nombre de Yeshúa HaMashíaj, avivo el don que YHWH puso en mí.
Rechazo la tibieza, la apatía y el miedo; recibo poder, amor y dominio propio.
Mi oído espiritual se abre, mi corazón se alinea y mis pasos obedecen al Ruaj HaKodesh.
Todo lo que YHWH depositó en mí despierta ahora y produce fruto para Su gloria.
Soy antorcha encendida: llevo luz a mi casa, mi ciudad y mi generación.
¡Amén!
Oración profética poderosa
Padre Eterno, YHWH de mi salvación, gracias por Tu fidelidad.
Ruaj HaKodesh, sopla sobre mí ahora. Quita la ceniza del desánimo, limpia mi mente de toda mentira, y aviva el carbón de Tu llamado en mi interior.
Yeshúa HaMashíaj, coloco mi vida, mis dones y mi servicio en Tu altar.
Que Tu fuego consuma todo lo que no te honra y fortalezca lo que Tú plantaste en mí.
Dame disciplina para alimentar la llama con Tu Palabra, valentía para obedecer, y sensibilidad para seguir Tu voz.
Declaro que hoy renace mi visión, se afila mi fe y se activa mi autoridad en Ti.
¡Que el aceite fresco del Espíritu fluya sobre mí y sobre mi casa!
En el Nombre santo de Yeshúa HaMashíaj.
Amén.
No fuiste llamado a vivir con una chispa, sino con fuego constante. Esta semana, vuelve al altar: Palabra cada día, oración con propósito, obediencia práctica. Aviva lo que ya tienes; YHWH pondrá el resto.
Shalom. Que el Ruaj HaKodesh encienda tu interior y que la luz de YHWH resplandezca en tu casa.




Comentarios